Qué ganas tenía de encontrar cositas chulas que iluminar dentro de un territorio no confinado! Con el coronavirus no resulta fácil hacer fotos si no queremos saltarnos ninguna prohibición. Así que la primer oportunidad que he tenido de escaparme a hacer lo que más me gusta, que es iluminar por la noche, lo hice.

Llevaba ya un tiempo con el coche localizado, pero cuando podía no había un cielo que me convenciese y cuando el cielo pintaba chulo, no he podido hacerle la visita de rigor.

Se trata de un Dyane 6 que esta hecho polvo, pero esos coches que llevan tantos años a la intemperie son los mejores. Tienen esa herrumbre y una cantidad de musgo y líquenes que les hace únicos.

¿Cómo la hice?

En todas las nocturnas en las que ilumino sigo el mismo proceso: elijo el encuadre, calculo la exposición de la escena y con eso empiezo a aplicar luces.

En este caso usé el samyang 12mm, es un objetivo que llevaba mucho tiempo queriendo usar. Se trata de una focal similar al 8mm en apsc y tras una noche con Daniel Pastor decidí que tenía que pasar a formar parte de mi equipo.

La escena se iluminó con una linterna calibrada para que dé el color blanco a la temperatura de color seleccionada para el cielo y los faros e interior del vehículo con una muy cálida.

Nos vemos en unos días. Sed felices!

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